Cada día, las cuentas públicas aumentan su deuda. 300 millones de euros es la cifra que los ayuntamientos españoles deben a las empresas que han sido contratadas para realizar diferentes servicios de jardinería.
Si este verano la patronal de servicios de limpieza denunciaba que los ayuntamientos les debían 3.425 millones de euros, ahora son las de jardinería las que se unen y reclaman sus 300 millones pendientes de pago.
La capital española debe más de 64 millones de euros, seguida de Granada (10 millones), Zaragoza (9 millones), Benálmádena (Málaga, 8’5 millones), Parla y Alcalá de Henares (Madrid, 7 millones cada una), Huelva, Valdemoro (Madrid) y Almería (5 millones cada una) y La Línea de La Concepción (Cádiz, 4’2 millones), según los datos de la Asociación Española de Empresas de Parques y Jardines (Aseja).
Según Javier Sigüenza, contraer una deuda de estas proporciones supone un importante desequilibrio financiero para todas las empresas de jardinería, puesto que éstas cuentan con un gran contratación pública en su facturación. Tan sólo en Madrid, la deuda de contraída pone en riesgo la viabilidad económica de un gran número de empresas así como la pérdida directa de más de 7.000 puestos de trabajo.
Foto: Globales Madrid