Las rosas son flores muy especiales, tanto si las compras, te las regalan o bien tienes un rosal en tu jardín. Le dan un aspecto muy bonito a cualquier rincón, e incluso muy original ya que pueden ser en varios colores, no únicamente en el clásico rojo que todo el mundo conoce.
Plantar un rosal en tu hogar es una idea fantástica, ya que no es necesario tener un jardín, podrás hacerlo en una terraza o patio, por ejemplo. Si quieres sacarle el máximo partido y hacer que se mantengan en mejores condiciones y duren mucho más, sigue leyendo y descubre unos cuantos trucos para poder hacerlo.
Rosales duraderos
- Iluminación: es muy importante que la luz solar pueda llegarles al menos 6 horas al día, ya que incluso las variedades que prefieren sombra necesitan 4-6 horitas de sol diariamente.
- Drenaje: imprescindible que sea bueno para que el agua no se acumule, pero también debe retener un poco la humedad. Prepara el sistema adecuado en función del lugar en el que pondrás el rosal, tanto si es en suelo como en una planta.
- Rosas marchitas: ve quitando las rosas que se vayan marchitado, así dejarás espacio a que salgan las nuevas. Cuando veas que se secan, ya puedes quitarlas porque estarán a un paso de marchitarse.
- Poda: es uno de los cuidados más importantes, ya que si la haces bien florecerá muchísimo y de forma más sana. Tienes que podarlo en invierno ya que es cuando está adormecido, como muy tarde en febrero-marzo. Utiliza tijeras bien afiladas y haz los cortes hacia dentro para que el agua no se acumule, teniendo cuidado de no cortar sobre los nudos.
- Plagas: su prevención es muy importante, así no tendrás que lamentar no haberlo hecho cuando alguna te haya invadido. De todas formas, algunas plagas tienen remedio, pero bien es cierto que no merece la pena arriesgarse. Utiliza un producto para prevenirlas, con especial atención a pulgones y escarabajos, que son los insectos que más suelen atacar a los rosales.
Si eres una persona estricta en todos estos cuidados, puedes tener la seguridad de que tu rosal va a tener una vida muy larga y prolífica.