La protagonista principal en los jardines suele ser la vegetación pero, poco a poco, la inclusión de nuevos elementos ayuda a resaltar las especies más valoradas y embellecer aún más este espacio. Y, por ejemplo, la creación de un estanque permite, además, la presencia de plantas acuáticas y aquellas que suelen requerir gran cantidad de agua para lucir siempre en buen estado.
Consideraciones previas
Antes de comenzar la instalación del estanque hay que tener en cuenta varios aspectos importantes:
- Su ubicación: Hay que valorar detenidamente el espacio más adecuado para su ubicación ya que, por ejemplo, no se recomienda que se encuentre debajo de los árboles porque sus hojas pueden contaminarlo y sus raíces llegar a agujerearlo. Tampoco se recomienda que se encuentre en un espacio con demasiadas horas de sol ya que en verano es frecuente que proliferen las algas por esta razón.
- Sus medidas: Conviene que no ocupe un espacio excesivo dentro del jardín, pero no existe límite. Aunque es necesario delimitar precisamente las medidas que va a tener porque cuando se trata de pequeñas superficies –hasta 4 ó 5 m2.- se suele trabajar con vasos prefabricados, mientras que para los diseños personalizados o las grandes superficies se instalan láminas flexibles.
- La disponibilidad para mantenerlo: Los estanques requieren unos cuidados básicos que, aunque mínimos, deben realizarse. Pese a que se disponga de filtros y bombas fundamentales para mantener el agua en perfecto estado de salubridad, es necesario también realizar tareas de limpieza obligatorias para evitar su deterioro.
Tipos de estanques
Una vez concretados estos aspectos, conviene conocer los tipos de estanques disponibles en el mercado para instalar el que mejor se adapte a los gustos y las necesidades de cada uno.
- Estanques prefabricados o artificiales: Fabricados con fibra de vidrio o plástico, son ideales para los jardines de menor tamaño y facilitan notablemente su instalación. Se presentan con formas muy diversas y la posibilidad de personalizarlos en mayor o menos medida con plantas, guijarros y piedras que disimulen sus bordes. Los vasos más pequeños pueden encontrarse por unos 65 o 70 euros y los de mayor tamaño y filtros integrados pueden alcanzar los 350 euros.
- Estanque de láminas: Se crean con láminas impermeables de PVC y favorecen su integración en el entorno gracias a su flexibilidad y las posibilidades de personalización –permiten todo tipo de tamaños y formas-. Hay que tener en cuenta el tamaño del estanque para elegir el grosor y la medida de la lámina, que puede adquirirse a partir de 5 euros el metro cuadrado.