La hiedra común crece al aire libre sobre paredes, cercos y el exterior de las casas. Esta enredadera leñosa puede ser también usada como cobertora del suelo o como planta de interior cultivada en maceta. Suele ser una planta sana, pero es susceptible a varias enfermedades e infestaciones de insectos que pueden causar un deterioro repentino y muerte.
La antracnosis es una enfermedad fúngica que puede causar el marchitamiento y deterior de la hiedra común. El hongo Colletotrichum trichellum (o C. gloeosporiodes) es el causante de esta enfermedad. La antracnosis se propaga mediante el agua que salpica, por insectos o por el viento, infectando a plantas cercanas. La hiedra también es susceptible a varios insectos dañinos, como las cochinillas. Estas son muy pequeñas, de forma ovalada y cubiertas de una cera pulverulenta. Las cochinillas pueden hacer que la hiedra tenga un menor vigor y se deteriores. Son más activas en climas cálidos y secos y dañan a la planta al alimentarse de sus hojas perforándolas con sus aparatos bucales.
La hiedra infectada con antracnosis suelen desarrollar manchas foliares marrones. Estas manchas comienzan generalmente cerca de los márgenes y dentro de ellas pueden llegar a verse cuerpos fructíferos negros. Si las hojas desarrollan lesiones constrictoras, estas causan deformación de tallos, marchitamiento y deterioro. La hiedra que sufre de antracnosis puede eventualmente sufrir de caída prematura de hojas y morir si la infección es severa. Las infestaciones con cochinillas pueden hacer que las hojas se vean manchadas o moteadas. Durante su alimentación, las cochinillas toman savia de las hojas y secretan una sustancia conocida como melaza, que se pega a las hojas y tallos. El hongo fumagina encuentra la melaza y se adhiere a ella, haciendo que la hiedra desarrolle una capa negra de hongos sobre la superficie de sus hojas y tallos. Aunque la fumagina no suele ser dañina para la hiedra, las cochinillas pueden estresar a la planta y causar su deterioro. Si no las tratas, estos insectos pueden matar a la planta.
La prevención de la antracnosis en hiedras se logra regando temprano por la mañana, controlando los insectos y eliminando las hojas muertas frecuentemente. Evita manejar las hojas cuando están mojadas para evitar diseminar el hongo causante. Las cochinillas pueden ser eliminadas frotándolas con un algodón embebido en alcohol, lo cual es más efectivo cuando la infestación es leve. Las cochinillas migran a otras plantas, así que revísalas para ver si estos insectos se encuentran presentes.
Según el Sistema de Extensión Cooperativa de Alabama, puedes encontrar en los centros de jardinería varios fungicidas para el control de antracnosis en hiedra. Aplica el fungicida a tus plantas siguiendo las instrucciones del envase. Los productos que contienen mancozeb o metil tiofanato suelen usarse para controlar antracnosis en hiedra común. El control químico de cochinillas puede ser difícil porque el insecto se esconde en las grietas y fisuras de las plantas, dificultando la llegada del producto. Los insecticidas de contacto como el aceite hortícola suelen ser usados para eliminar las cochinillas de la hiedra. Los aceites trabajan cubriendo al insecto, sofocándolos y matándolos. El aceite hortícola también ayuda a despegar la fumagina, facilitando su eliminación de los tallos y hojas. Algunas plantas son sensibles al aceite hortícola, así que prueba el producto en una parte pequeña antes de aplicarlo a toda la planta. Si no ves efectos adversos después de siete días, es seguro aplicarlo a toda la planta.